domingo, 5 de marzo de 2017

"Enamórate de un viajero que te saque de la rutina y te lleve a vivir una aventura. Uno de esos que ven la vida de otra manera. Un soñador que no se conforme con lo bueno, que busque lo extraordinario.
De esas personas que te dan la mano para salir de la zona de confort, que te inspiran ese valor para saltar al vacío.
Un viajero con mil historias para contar…pero que escuche fascinado cuando hablan los demás. Uno de esos locos que pueden comunicarse con cualquiera, no importa el idioma, no importan las costumbres, siempre encuentra la forma de hacerse entender. Tiene amigos en todo el mundo, porque sabe que más que tierras, lo importante es recorrer personas. Es capaz de encontrar la felicidad, tanto en una isla desierta, como en una cena multitudinaria con gente de todo el mundo.
Enamórate de un comprador compulsivo de experiencias, no de cosas. Que entendió que una vez que viviste algo, no hay forma de perderlo, ni de que te lo saquen. Que sabe que el único crecimiento en las personas se da a través de lo vivido, y que hay gente que puede vivir mil años sin haber crecido un centímetro…pero hay otros que en pocos años ya parecen gigantes.
Una persona que sea capaz de mantener la calma en las situaciones más difíciles. Que cuando el plan A no funciona sienta la excitación y la expectativa de probar el plan B. Porque sabe que al reverso de la palabra crisis está escrito “oportunidad”.
Enamórate de alguien que ande descalzo. Que le guste sentir el pasto entre los dedos de los pies. Que piense que al mundo hay que usarlo sin prohibiciones pero cuidarlo como si fuera sagrado. Que tenga claro que no estamos solos y que la convivencia es lo que nos hace únicos.
Alguien que se escape de los lujos y de los “all inclusive”, porque no necesita que le sirvan para disfrutar, disfruta sirviéndose a si mismo. Alguien que duerma plácidamente tanto en la cama de un gran hotel, como en una hamaca en la playa. Porque los que utilizan su energía para vivir intensamente, duermen sin problemas soñando con lo que vendrá mañana.
Enamórate de un viajero al que le duelan las injusticias, que crea que paso a paso, se puede cambiar el mundo. Uno de esos que ponen su granito de arena sin esperar que los demás lo hagan, porque sabe que con su ejemplo se puede formar un arenal.
No hace falta que salgas corriendo a buscarlo a un aeropuerto o espíes en las librerías quien compra las guías de viaje. Basta con que te acerques al espejo, y veas los ojos de esa persona que te mira. En esos ojos, seguro podras ver los viajes que hizo y, sobre todo, los que quiere hacer. Será cuestión de que lo acompañes, no vas a encontrar a
nadie mejor para tu aventura."

Eso me dijeron.
Eso lei.
Eso hice.
Me enamore de Emiliano.

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